Glasnot!

Esta palabra pertenece ya a la geografía de nuestra memoria. Un vocablo ruso, glasnot, que se instaló en las conversaciones políticas de mediados de los 80 del pasado siglo, gracias a la irrupción en 1986 de un nuevo líder del PCUS; Mijaíl Gorbachov. La vieja potencia soviética era más vieja y menos eficiente de lo que nadie pudo pensar, y el nuevo líder condujo a su partido y a la extinta URSS a un cambio sin precedentes, resumido en dos palabras: “glasnot” y “perestroika”, transparencia y reestructuración (que en occidente fue definido también como apertura). Pero centrémonos en la glasnot, la tan atribulada transparencia. El actual santo grial de nuestros próceres políticos. Cada cierto período de tiempo la política necesita de nuevos vocablos que resulten inspiradores. En la sociedad de la infoxicación y de los 140 caracteres, esto es más […]