Granada y Chiang Mai: una oportunidad de cooperación internacional para la innovación

Dentro del programa IURC (International Urban and Regional Cooperation) Asia – Australasia, el pasado 20 de marzo celebró una reunión especial en Chiang Mai (Tailandia), aprovechando la reunión que los embajadores europeos acreditados en Bangkok, a invitación del Embajador de la UE en este país asiático, David Daly, tuvieron durante dos días en esta increíble ciudad.

Dado que las ciudades de Granada y Chiang Mai llevan ya un tiempo trabajando en desarrollar proyectos de cooperación institucional y empresarial conjuntos, como continuación de la segunda fase del proyecto, tras la primera antes de la pandemia con China y que llevó a Granada a trabajar con Kuming, la capital de la provincia de Yunan. En esta ocasión, y dada la oportunidad de poder explicar in situ al cuerpo diplomático de la UE acreditado en Tailandia, los efectos reales y los proyectos en curso de este programa de la Unión Europea. Especialmente los desarrollados por el EU Foreign Policy Instruments (FPI) para Asia Pacífico dirigido por Michel Mouchiroud.

Las diferencias culturales y de los sistemas de gestión entre Tailandia y España son obvias, pero el impulso de las dos ciudades con sus dos alcaldes al frente Assanee Buranupakorn y Paco Cuenca, y el ecosistema que está detrás con las universidades, parques tecnológicos (STeP y PTS) y las cámaras de comercio y empresas, son una oportunidad que debemos aprovechar para crear las sinergias que provoquen esta colaboración, especialmente en el campo de la innovación de la Smart City para hacer ciudades más agradables.

En la actualidad estamos trabajando en establecer el marco de un futuro proyecto que poder presentar al Horizonte Europa, gracias a la colaboración de estas dos ciudades y otras europeas y asiáticas que trabajamos en el IURC Asia-Australasia. Por ello, tuve el placer de representar a mi ciudad a invitación del programa, en un largo viaje que me llevó a estar en Chiang Mai 40 horas de intenso trabajo (y mas de 76 de viaje entre varios aeropuertos), para sentar las bases del trabajo futuro, reforzar las relaciones con nuestros colegas del ayuntamiento de Chiang Mai y del Parque Tecnológico y Científico STeP, así como con otras instituciones locales.

No quiero terminar sin agradecer el apoyo de la Embajada Española de Tailandia, con su embajador al frente D. Felipe de la Romera, y especialmente al equipo de la IURC en Bangkok, con Siriwat Pokrajen, Kanyarat Aksorn y Pablo Gándara, ya que sin ellos esto hubiese sido imposible. Ahora queda lo más importante, trasladar toda esta red de relaciones, ideas y necesidades a un proyecto tangible que deje huella en nuestros territorios y a las personas en el futuro. En ello estamos ya…

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